Júpiter es el principal dios de la mitología romana, «padre de dioses y de hombres y principal deidad de la triada capitolina”, una figura importante dentro de la cultura romana e italiana, que da nombre a esta cepa única en su clase en Bolivia y que hoy puedes disfrutarla dentro de nuestra propuesta de vinos de altura.
Sangiovese deriva del latín “Sanguis Jovis” (Sangre de Júpiter) y su origen data de finales del siglo XVI, cuando fue comenzada a cultivarse en la Toscana de Etruscos italiana.
Es sin duda alguna una de las cepas más representativas de Italia; representan casi el 10% del viñedo italiano y el 15% del vino con denominación de origen. Es una variedad que se utiliza en 18 regiones, 70 provincias y en más de 190 tipos de vino diferentes. (Fuente: cocinayvino.com)
Para la familia Magnus fue uno de los retos más importantes apostar a una cepa que era desconocida en la tradición vitivinícola de nuestros valles, y somos hoy en día los únicos productores de este varietal; nuestras cepas de Sangiovese se cultivan en El Portillo y en el Valle de la Concepción y logran una producción de 5,6 kg por planta: luego de la cosecha manual, pasa por un añejamiento de 12 meses en barrica americana y francesa.
Sangiovese es un vino de ligero rojo púrpura que evoluciona hacia el anaranjado, presenta aromas a frutos rojos y agradables notas herbáceas. Es un vino carnoso de taninos importantes, alta acidez y estructura y se despide con ligeras y agradables notas amargas.
Y como buen vino italiano, nuestra recomendación es de acompañante perfecto para una pasta o una pìzza, aunque también es recomendable con carnes a la parrilla, ahumadas o una picada típica de jamones y quesos.
Sangiovese es un vino con fortaleza, es un vino de deidades, de dioses y de presencia ineludible; ideal para las reuniones de familia y de amigos, o para una cena en la mejor compañía, la sangre que despierta la pasión, la sangre de Júpiter que llega a tu mesa.